Opotóxicos

Ya escribí un día sobre los opocalipticos, esos seres negativos acerca de las oposiciones que pretenden contagiar esa negatividad a los demás.

Pues hoy me gustaría hacer una referencia a los opotóxicos y aconsejar tener mucho cuidado con ellos, ya que pueden ser incluso peores que los opocalípticos.

Los opotóxicos hacen cosas como:

- Agobiarte a más no poder.

- Pretender salirse siempre con la suya.

- Que tus horarios de estudio y de descanso sean los mismos que los suyos. Y nada de llegar a acuerdos, ellos imponen y sino, pues les parece más que mal.

- Que cuando ellos están libres, tu también lo estés. 

- Si ya acabaron su proceso de oposición y la tuya aun sigue, no lo comprenderán. Ahora hay que celebrar que se acabó todo y relax, cuando tu no te puedes permitir ni relax, ni tienes nada que celebrar por el momento. 

- Sueltan frases como "ahora que es finde y nos podíamos ver...". Que sea finde para ellos, no significa que no sea laborable para ti. El opositor a conciencia, muchas veces no sabe si es miércoles o domingo, más cuando tiene que compaginar otras cosas con su oposición.

- También sueltan frases como "es bueno salir a despejarse", cuando ellos están libres claro, cuando tienen su encierro ni de broma. Pues el opositor a conciencia muchas veces se siente mal después de salir o de ver la televisión, todos los verdaderos opositores lo sabemos. Nos entra aun más agobio el pensar que podríamos haber estado dedicando ese tiempo a estudiar.

Mi consejo es alejarse lo más posible de estas personas, porque te consumen la paciencia. Somos dueños de nuestras vidas y otros opositores deberían ser quienes tienen más empatía, aunque muchas personas son egoístas y caprichosas, cosa que en las oposiciones también se ve reflejado, o incluso acentuado. Sobre todo se caracterizan por un pasotisto total cuando les interesa, tu sabes cuando se examina, pero ellos ni idea de cómo vas tu o cómo es realmente tu oposición, ya que solo ven lo suyo. Pero cuando les da por ahí, agobian a más no poder. No necesitan nuestras explicaciones, así que mejor mantenerlos al margen, al menos mientras estemos opositando. Nuestra salud no tiene precio.